Tribuna de Opinión
Por Martín Scalabrini Ortiz
“Necesaria, pero no suficiente” es lo que ve Martín Scalabrini Ortiz, ingeniero químico, miembro de Proyecto Sur y nieto del escritor fundador de Forja, Raúl Scalabrini Ortiz. El viernes pasó por Paraná para hablar de “La política petrolera de la Argentina hoy”, en una charla que organizó el Centro de Estudios de la Identidad y la Corriente Juan Domingo Perón.
“Fue una vuelta de página, el reconocimiento del fracaso del modelo neoliberal implantado durante la década del noventa. Es una medida necesaria pero no suficiente, porque se sigue manteniendo la misma matriz jurídico-legal de la década del 90”, dijo, respecto a la decisión del gobierno nacional de estatizar las acciones que poseía Repsol en YPF.
El especialista señaló que los decretos de desregulación de hidrocarburos del año 1989, que firmó Carlos Menem, aún siguen vigentes. “YPF produce el 30% de la producción de hidrocarburos de la república Argentina; el 70% restante sigue estando en manos de empresas extranjeras, regidas bajo estos decretos. Es decir que la producción del petróleo y el gas aún sigue considerada un
commoditie, por lo menos en este porcentaje de producción. Es por eso que en los primeros cinco meses de este año, a pesar de la medida de la expropiación se exportó petróleo por mil millones y se exportaron naftas por casi mil millones, en una situación donde tenemos déficit comercial en balanza energética”.
Matriz. “Es una decisión política basada más que nada en la necesidad, más allá de las convicciones que pueda haber en algunos grupos kirchneristas, para poder retomar al menos una parte de soberanía energética. Lo que se vaya a plantear con la empresa de ahora en más va a resultar decisorio a la hora de lograr efectivamente soberanía energética. Eso implica autoabastecimiento, combustible para la industria, energía eléctrica no solo generada por combustibles fósiles”, afirmó.
“Si no se modifica la matriz jurídico-legal, si no se hace presente el estado en la producción total de hidrocarburos, y si no se modifica la alianza que el gobierno nacional tiene con los grupos extranjeros, yo creo que vamos a estar en la misma”, resumió.
“Fue una vuelta de página, el reconocimiento del fracaso del modelo neoliberal implantado durante la década del noventa. Es una medida necesaria pero no suficiente, porque se sigue manteniendo la misma matriz jurídico-legal de la década del 90”, dijo, respecto a la decisión del gobierno nacional de estatizar las acciones que poseía Repsol en YPF.
El especialista señaló que los decretos de desregulación de hidrocarburos del año 1989, que firmó Carlos Menem, aún siguen vigentes. “YPF produce el 30% de la producción de hidrocarburos de la república Argentina; el 70% restante sigue estando en manos de empresas extranjeras, regidas bajo estos decretos. Es decir que la producción del petróleo y el gas aún sigue considerada un
commoditie, por lo menos en este porcentaje de producción. Es por eso que en los primeros cinco meses de este año, a pesar de la medida de la expropiación se exportó petróleo por mil millones y se exportaron naftas por casi mil millones, en una situación donde tenemos déficit comercial en balanza energética”.
Matriz. “Es una decisión política basada más que nada en la necesidad, más allá de las convicciones que pueda haber en algunos grupos kirchneristas, para poder retomar al menos una parte de soberanía energética. Lo que se vaya a plantear con la empresa de ahora en más va a resultar decisorio a la hora de lograr efectivamente soberanía energética. Eso implica autoabastecimiento, combustible para la industria, energía eléctrica no solo generada por combustibles fósiles”, afirmó.
“Si no se modifica la matriz jurídico-legal, si no se hace presente el estado en la producción total de hidrocarburos, y si no se modifica la alianza que el gobierno nacional tiene con los grupos extranjeros, yo creo que vamos a estar en la misma”, resumió.
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