PNÁ ABORTÓ EL “NINGUNEO”

VASQUEZ Y DELVECCHIO

AL CONFESIONARIO

En el mediodía de ayer, luego de haber movilizado por la calles de la ciudad a sus más íntimos colaboradores “para vigilar de cerca” la distribución de la nueva edición del periódico PNÁ, el intendente Ángel Vásquez y sus más sus inmediatos laderos terminaron acudiendo al “monje negro” Daniel Korona para confesarse y recibir la bendición y el concejo acorde a la ingrata y sorpresiva novedad registrada desde las primeras horas del día.
No lo podían creer ni se explicaban lo que terminaban de comprobar en la página 11 de dicha publicación cuya tirada de 20 mil ejemplares circula por todo el territorio provincial. Es que no habían sido consultados, como se suele hacer desde otros medios, si le convenía o no a Vásquez que se sacara dos tercios de página dedicados nada menos que a su principal opositor, Marcelo González del Peronismo Federal, de cara a las próximas elecciones.
La primera reacción fue la de estilo, marca “Vásquez”. Llamó para increpar al editor del medio escrito por el atrevimiento inconsulto, sin respetar sus códigos, llámese sin ajustarse a la estrategia de “ningunear” a sus opositores. Esta vez no hubo culo corto que valga, ya que el editor fue terminante: “las publicaciones las manejo yo y no suelo pedir permiso a nadie”. Ni siquiera le dio el gusto a nuestro desencajado intendente por contarle quién había sido el sponsor de los cuatro mil nacionales que, dicen, cuesta un espacio de esas medidas en PNÁ.
Este revés no fue digerido en toda la mañana y se lo vio al intendente recorrer sin rumbo determinado las calles asfaltadas de la ciudad con el rostro adusto y, como siempre, con un celular al oído.
Sobre el mediodía no pudo más y se acercó al confesionario de calle Ramírez al 900 para resolver el intríngulis. Allí recién pudo hacer un ritual estilo yoga y descomprimir la bronca que le anudaba la garganta. Pero igual se escuchó decir en la despedida:
- ¡Me la van a pagar, claro que me la van a pagar!