EL VERSO DE LAS CLOACAS

HACE SIETE AÑOS

QUE NOS TIENE CON LA MISMA HISTORIA

DIJO VÁSQUEZ:
“Así nuestra ciudad definitivamente tendrá cloacas en este año 2005”
Cuando hizo su primera campaña Ángel Vásquez nos contaba que sus primeras obras se concretarían en el primer año. Las cloacas y el gas natural eran una realidad porque sus contactos empresarios le permitirían hacer estas obras sin necesidad de financiación del estado nacional ni provincial.
Por entonces aparecía disfrazado como empresario exitoso, tras su relación con el ministro Schiavoni con quién inventaron muchas obras públicas en los papeles, pero que en realidad nunca se hicieron. Prueba está que cuando en la AFIP constataron el movimiento de las cuentas bancarias se encontraron con una millonaria evasión fiscal que rondaba 1.400.000 dólares.
En San Benito, no obstante, se hacía pasar como dueño de una gran empresa constructora con la que pensaba concretar estos primeros objetivos.

A LAS PRUEBAS ME REMITO....

Llegó a la intendencia y el discurso comenzó a tomar un rumbo distinto, matizado por otras tantas excusas hasta que el gobernador Busti le prometió ayuda para iniciar la obra de cloacas y firmó el Decreto N° 1333 para comprar el predio por 120.000 pesos (en realidad a la familia Bertoldi le dieron 40.000) . “Así nuestra ciudad definitivamente tendrá cloacas en este año 2005”... fue el cuento de nuestro pájaro carpintero.
...“Lo cierto es que durante muchos años desfilaron varias personas en este cargo político consumiéndose además muchos años en este proyecto…bla, bla, bla…”
En realidad en los galpones municipales existían por entonces cinco kilómetros de caño de 200 mm. de diámetro que había dejado la administración de A. González. En esa administración se dejó el proyecto de obra completo, se dejaron los puntos fijos para el inicio de los trabajos y el sector donde se debería hacer las lagunas de estabilización con formal pedido de expropiación ingresado por Mesa de Entradas de la H. Cámara de Diputados.
Llegaron los ocho años de administración justicialista de Oscar Acosta y nada se hizo. Es un problema de los gobiernos justicialistas de entonces…y de ahora.
Porque desde aquel mes de agosto de 2005 y las cloacas prometidas por Ángel Vásquez para ese año ya pasaron cinco años, si ¡cinco años!, por lo que también ahora siguen “consumiéndose años y más años” y las cloacas no se terminan.
¿Y los cinco kilómetros de caño donde están? Algunos quedaron, como los de la plaza del Barrio San Martín donde se pueden observar algunos adornando las pérgolas. Otros son usados para reemplazar a las viguetas de madera en trabajos de hormigonado de bases (como se vio en el nuevo Palacio Municipal que se construye aceleradamente). ¿Y todos los otros? Se los robaron a casi todos. Un poco Páez, un poco Vásquez, un poco Juan, un poco Pedro y chau caños.
La película no termina allí, porque de las lagunas ya hemos publicado más de veinte postales del lugar y son elocuentes. No servirán porque están mal construidas, porque no dan los niveles para el drenaje por gravedad y porque al estar sobre un manto de arena mayor a tres metros serán el más perfecto filtro contaminante de nuestras napas subterráneas de agua potable.
Viene una nueva campaña y es muy posible que se habiliten como sea algunas conexiones domiciliarias, aún cuando los líquidos terminen en Las Tunas. El calvario llegará después.