QUIENES SON LOS CONCEJALES
La pregunta que generalmente se hace la gente en San Benito es: ¿quiénes son los concejales? Es que son los ausentes sin aviso de todo contacto con la población, ausentes en los momentos en que los ciudadanos necesitan respuestas, ausentes de todo, menos a la hora de sentarse a lo sumo dos veces al mes a esperar que llegue el cheque con la dieta que se les abona en sendos pagos.En general responden a las directivas que reciben del Ejecutivo Municipal, encabezado por el intendente Ángel Vásquez, quién tiene como nexo entre ambos al asesor Gilberto Del Vecchio, quién es el redactor de todos los documentos que se firman en el Honorable Concejo Deliberante.
En el caso de la Plaza “El Sueño de los Ángeles (Vásquez)” participaron en la componenda para complacer al intendente la Presidente Marina Franco (Frente para la Victoria), asistida por el Secretario Miguel Esteban Sosa y los siguientes Concejales: María Ines Musich , Lisandro Jesús Reya, Andrés Domingo Casco, Elsa Segovia, Cristian Hernán Toffolini (Bloque Frente para la Victoria), Elbio Tula y Marta Tejeda (Bloque Frente para la Victoria y Justicia Social), Domingo Andino y Silvia Bertolini (Bloque Compromiso y Futuro).
Hay que destacar que el Concejo Deliberante en San Benito no tiene presupuesto propio, es decir, su propia cuenta bancaria, sino que el dinero es manejado desde la Secretaría de Hacienda y desde allí se dispone cuando tendrán el cheque de sus dietas. Esta dependencia es ilógica, si se tiene en cuenta que la independencia de poderes es una norma constitucional para asegurar, precisamente, el funcionamiento de la institución municipal. Demás está anotar que no existe independencia desde el momento que se tiene dependencia económica.
Dentro de los argumentos esgrimidos para poner el gracioso nombre a la Plaza de calle Seguí y Libertad se adujo que en un rincón del antiguo testamento abría una alusión a este giro, pero en realidad es mentira que en la biblia exista.
Si se quiere, lo más próximo es la letra del tema “Un Sueño” de los Ángeles de Charly que dice: “Hoy en la mañana desperté llorando, es que tuve un sueño y me dolió…”
Hemos escuchado otros argumentos tan estúpidos e imbéciles que ni merecen análisis.
No hay un pretexto lógico para justificar lo injustificable, porque el agravio a nuestros Héroes de Malvinas se multiplica al descubrir la intencionalidad del nuevo nombre impuesto a un paseo público.
Esperamos que los que están vinculados con la gesta de Malvinas y que han tenido que batallar más en el terreno político y cultural para ser tenidos en cuenta, den la lucha en este nuevo frente de batalla para recuperar la denominación de esta plazita, que por pequeña que sea no deja de ser un símbolo representativo de nuestros héroes, extremadamente superiores a nuestros ángeles de entrecasa.
Es de esperar también que la supuesta paz a la que invita el nombre de la nueva plaza no sea inspirada en los expulsados del paraíso, como Azrael, Ariel o Luzbel, entre otros ángeles demoníacos.
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