jueves, 4 de octubre de 2012

ELECCIONES EN VENEZUELA. SU INCIDENCIA EN NUESTRO PAÍS

UNA VICTORIA PREVISIBLE QUE AQUÍ ESTÁ DISFRAZADA POR LOS DESEOS DEL OFICIALISMO
Las declaraciones del oficialismo respecto a las elecciones del domingo en Venezuela tiene una alta dosis de esperanzas propias del entorno al poder, ya que según sus cálculos servirá para afianzar una tendencia en el cono sur de América.
Es algo que no está del todo claro.
La diferencia entre Venezuela con Argentina es que allá hay dólares frescos que ingresan por varios cientos de millones todos los días como consecuencia de la venta del crudo, por ello, cualquier comparación sería odiosa, más que tendenciosa.
Lo que está claro, de acuerdo a los comentarios internacionales, es que Chaves puede triunfar pero con porcentajes por debajo de los que venía ganando con anterioridad; Capriles, ('el burgués' de acuerdo a Chaves) ha venido cosechando más del 80% de los indecisos en las últimas semanas y podría llegar a acercarse peligrosamente al 40% cautivo que tiene el actual presidente.
No sería arriesgado pensar que un triunfo de Chaves rondaría en una diferencia a favor entre el 5 y el 9%.

La influencia electoral "progresista" no se traducirá en Argentina por muchas razones, una de ellas, que hará muy frágil la circunstancial euforia, será lo que ocurra el próximo 8 de noviembre cuando se de el segundo cacerolazo en todo el país, que puede ser el verdadero termómetro para medir nuestro estado de ánimo.
Para colmo de males termina de abrir con una torpeza inaudita otro frente de batalla muy peligroso, nada menos que con las fuerzas de seguridad. La movilización de gendarmería y prefectura puede terminar siendo una cabecera de playa para futuras acciones tendientes a debilitar al gobierno central.
Por parte del poder provincial ya se ven algunos mensajes, como por ejemplo el cambio de dirección con respecto a los afiliados (dirigentes) suspendidos en su afiliación, muchos de los cuales ya están siendo repatriados y podría darse, de boca del propio gobernador, una reintegración masiva antes de fin de año.
Las urgencias electorales no permitirán el lujo de dejarlos fuera.
Nosotros....ya lo habíamos anticipado en noviembre de 2011.

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