EL INTENDENTE TREPPO DE SEGUÍ FUE UNO DE LOS ENCARGADOS DE HACER CORTINAS DE HUMO SOBRE LA VERDADERA FINALIDAD DE LA LIGA DE INTENDENTES |
Cuando se publicó la noticia relacionada con la creación de una Liga de Intendentes “K” del Departamento Paraná pudimos atar cabos sueltos sobre noticias que parecían hasta ese momento no tener asidero.
Sabíamos sobre reuniones previas realizadas por intendentes y legisladores de la zona y la versión que circuló de inmediato es que algo estaban tramando. Así fue que al poco tiempo se dio a publicidad como una gran noticia que se habían reunido para conformar la promocionada Liga, laque quedó bajo la presidencia del intendente Treppo de Seguí.
En San Benito se sabía de una reunión realizada, asado mediante en lo de Carlos Alberto Rocha, de un cónclave con unos pocos cabezotes departamentales en la que no se había comenzado con este propósito concreto, sino que la conversación estuvo circunscripta en principio sobre el posicionamiento político de cara a los años venideros.
Entonces se valoró en demasía la importancia de los votos que se pueden colectar en el Departamento Paraná por parte del oficialismo y a estos se los justipreció como un elemento de presión que eventualmente pudiera servir a los interlocutores reunidos ante el gobernador y el staff de gobierno provincial.
En esto tuvo la voz cantante el anfitrión y capo del vasquismo local Ángel Vásquez quien puso de relieve su opinión acerca del futuro. En esto fue muy pragmático y se manifestó partidario de que debían poner sobre la mesa el peso de los votos a la hora de cualquier reclamo; esa era la razón encubierta de buscar aliados en el departamento que aportaran una mayor cantidad de números ya que los 2.500 votos de Urribarri en nuestra ciudad se juntan en el barrio Humito de Paraná. El díscolo diputado provincial llegó a manifestar en dicha reunión que al “¨Pato” había que hacerle sentir que si quiere re reelección o apoyo a su delfín para el 2015 tendría que hacer “bien los deberes” con él y sus aliados.
De esa reunión no se supo más nada, aunque tuvo aristas impensadas ya que en el propio flanco local tuvo sorpresas desagradables ni bien terminó aquel cónclave, algo que narraremos aparte.
Cuando tuvimos noticias de esta reunión (que pudimos comprobar existió ya que se hizo a cincuenta metros de esta redacción) creímos que no llegarían a nada con esa sobredimensionada intención de posicionarse más alto de lo que son, algo así como lo reza el viejo adagio popular: fue como querer “hacer kk más alto que el cú”.
Sin embargo el nacimiento de la Liga de Intendentes “K” del Departamento Paraná fue la continuidad de aquella reunión preliminar y demostró que los que tienen apetito por crecer más rápido de lo normal son varios cabezones y no solamente Ángel Vásquez.
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