SE
LIMITÓ A PEDIR QUE SE MEJORE
LA ALIMENTACIÓN DE LOS NIÑOS
La
pasada semana se originó otro entredicho con el intendente Vásquez BB y una
empleada municipal debido a que esta última se quejó por la atención que se
brindaba en el Comedor Infantil del Barrio San Pedro de nuestra ciudad y por
las irregularidades que se observan en la provisión de los alimentos básicos
para la olla popular.
Al
parecer desde el intendente a los más allegados retiran alimentos para sus
respectivas familias del cuchitril de los chinos de calle Rivadavia a cuenta
del fondo provincial provisto por el C.O.P.N.A.F., razón por la cual la olla de
aquel comedor municipal cada día que pasa carga más agua salada y menos
proteínas.
La
ayudante de cocina Ángela Barroso, que cobra por hora alrededor de 10 pesos,
estaba cansada de observar esa notoria irregularidad y reclamó por una solución
para que se mejore la alimentación de los niños necesitados de aquella zona
distante.
La
solución fue inmediata. Como el hilo suele cortarse por lo más delgado, desde
el Ejecutivo Municipal no encontraron mejor solución que echarla sin más
trámite – “por buchona” – le dijeron en Personal.
La
encargada de darle la ingrata noticia fue Elsa Pross, encargada de retacear lo
máximo posible las horas que trabajan los empleados a destajo y siempre
predispuesta para ejecutar a los indefensos empleados temporarios que si no
agachan la cabeza saben que les espera la quita del trabajo y…¡a llorar al
cementerio!
Sin
embargo, en este caso particular, a Elsa Pross y al intendente Vásquez BB - que
había demostrado su rabieta echándola del trabajo – no les fue bien en la
perentoria solución que encontraron.
De
caso se hicieron eco tanto el Presidente del Honorable Concejo Deliberante
Eduardo Massei como el Secretario de Gremio de los municipales de San Benito
Ramón Cáceres, quienes trataron de contener a la compañera afectada
severamente.
La
empleada Ángela Barroso no se quedó de brazos cruzados; se emperifolló lo mejor
que pudo y se dirigió a Casa de Gobierno donde tiene su atalaya discreta el
diputado Vásquez Pá y allí le reclamó a viva voz lo dispuesto por el nene al
dejarla sin su sustento diario por reclamar lo que entendía era justo y le dijo
que si no la reincorporaban iba a denunciar todo lo que la sabía cerca de las
serias irregularidades que se observa en la entrega de alimentos para los niños
que se alimentan en aquel comedor municipal que funciona con dinero que provee
el C.O.P.N.A.F., al tiempo que le puntualizó un rosario de verdades que hicieron
sonrojar al “Machi” de San José de Colón.
-
O
me devuelven la changa o canto
– dijo la Barroso.
Vásquez
Pá vio que la cosa era en serio y, antes de meterse en otro lío de los tantos
que lo salpican últimamente, lo conchavó a su Chirolita Gilberto del Vecchio
para que hiciera los oficios necesarios para convencer al intendente BB que diera
marcha atrás porque hay que evitar más exposiciones necesarias…y Gilberto
reflexionó…
-
Dale
el trabajo de nuevo antes que cante y nos meta en otro quilombo innecesario. Acordate
lo que convinimos de andar con un perfil bien bajo hasta que pase el temporal, mirá que la cosa viene complicada…
…Y
la empleada ayudante de cocina recuperó su tarea en el comedor de Barrio San
Pedro.
¿Qué
tanto sabrá Barroso?
Como
dijo nuestro filósofo Seberniche:
-
Soldado
que recula sirva pa’ otra guerra!!!
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