EN LAS DURAS Y EN LAS MÁS DURAS

EN PATO ESTÁ SIEMPRE AL LADO DE CRISTINA....APLAUDIENDO

Pasó un acto más de nuestra presidenta en la provincia y van como seis, aunque en esta oportunidad la concurrencia fue mucho menor a otras oportunidades.
Más allá de la euforia propia de todos los locutores oficiales que multiplicaron por tres la cantidad, se estima que un poco más de 14.000 personas estuvieron en Colonia Avellaneda para asistir a los actos programados que, si se debe rescatar algo positivo, ha sido la muy  buena organización. El despliegue policial fue impresionante y su presencia sumó unas tres mil personas más. Y los adjudicatarios sumaban entre ellos sólos unas 2.000 personas.
La movilización fue interesante pero inferior a otras veces, lo que muestra que cuando estaba Néstor K había más cuidado para asegurar presencias a través de mayor presión a los gremios, que ayer lucieron sus multicolores gorritos para identificarse pero, que a la hora de sumar, eran grupos reducidos.
Ha sido un acto más, con la importancia histórica que ha tenido para Colonia Avellaneda al verse honrada por la visita de un Presidente de la Nación.
Los festejos pasaron y habrá que despertar rápidamente porque las exigencias lloverán ante la precariedad del entorno a estas nuevas familias que llegaron a Colonia: transporte público, atención primaria de la salud, mejoramiento vial (ayer el tierral era insoportable).
Hacemos votos porque nuestra hija mayor, Colonia Avellaneda, que nació en 1986 de un desprendimiento de la jurisdicción de San Benito a la que históricamente perteneció, tenga el vigor necesario para despegar definitivamente.