UNA CHICANA INNECESARIA
El ambiente político comienza a tomar temperatura a partir de la oficialización de las boletas que irán al cuarto oscuro en agosto y octubre respectivamente.
La principal divergencia se ha centrado en la pretensión del oficialismo de ir con la boleta provincial pegada a la boleta nacional con la candidatura presidencial, algo que a las claras es objetable por tratarse de elecciones con una marcada diferencia: las elecciones nacionales son obligatorias y las provinciales voluntarias.
Esto ya desató la protesta natural de los que se ven perjudicados, como el caso del F.E.F. que ya hizo escuchar su protesta a través del Dr. Reviriego, apoderado de ese partido. La protesta a todas luces es justificable porque se intenta desde el oficialismo hacer una maniobra de confusión hacia el electorado, lo que ya fue objetado en la Justicia Electoral.
Lo que llama la atención es la acción que, si se toma en cuenta la euforia triunfalista del gobierno, no se condice con la misma, más bien desnuda una realidad distinta.
Mientras tanto, a cuarenta y siete días de las elecciones primarias, el poco interés por participar en la población es notorio y se presume que será esa la tendencia para el 14 de agosto.
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