Nuestro club comenzó a participar de los campeonatos oficiales de la Liga Paranaense de Fútbol en 1954.
Hasta entonces venía compitiendo en la Liga del Sur y utilizaba la camiseta con bastones celestes, igual a la del Racing Club de Avellaneda.
Como ya había una camiseta con esos colores en la L.P.F. (Belgrano) le pidieron que la cambiara y así surgió la Banda Roja de izquierda a derecha, igual a la de River Plate; la misma se impuso por decisión del Cura Horacio Tomás Laurencena, párroco y Presidente del Club, que era fanático de los 'Millonarios' de entonces.
Culminó la disputa del torneo de Primera B.
Campeón Libanés que Ganó 5 a 2 a Banfield.
Segundos fueron SAN BENITO que ganó 5 a 0 a Bavio
y Alumni que le ganó 3 a 2 a Laprida.
En Universitario: Primer tiempo. Carlos Costa a
los 37´. 2do. T. H. Falco a los 11´, Carlos Costa a los 13´ de penal, Máximo
Müller a los 20’ y José M. Falco a los
45´.
SAN BENITO: Pedro Musich; Gerardo Michelín y Aldo
Bearzi; Pedro Téntor, Ademar Monai y Carlos Costa, José M. Falco, Aldo
Domínguez, Héctor E. Falco, Raúl Orzuza, Máximo Müller.
BAVIO: José Padilla; Carlos Troncoso y Carlos
Martínez; Ramón Alvarez, Ricardo Orellao
y Roberto Aguilar, José Bonilla, Ricardo Berón, Julián Duarte, Ricardo
Rodríguez y Pedro M. Gareis.
Referee Emilio E. Romero. 192 pesos de
recaudación. 1ra. Rueda ganó San
Benito 2 a 0.
Con un merecido cuasi inobjetable triunfo cerró
San Benito su campaña en este año en que volvió a los campeonatos de la Liga
Paranaense. El 5 a 0 indica a las claras las virtudes ya elogiadas de los
integrantes de este team, que obtuvo un honroso puesto en la tabla posicional.
En el partido de ayer sin lugar a dudas fue la defensa la que se adjudicó el
partido. Siempre bien ubicados, sus hombres quitaron, apoyaron y shotearon
cuando así lo indicaban las circunstancias. Cabe destacar que este desempeño
brillante no es de una tarde, sino de todas las que intervino este compacto y
efectivo bloque. Su línea de forwards tuvo todo el apoyo que solicitó, pero se
notó a sus integrantes muy personales, seguramente porque este era el último
match del torneo.
Su rival
ayer no le presentó lucha, pese a tener algunos chispazos, nunca pudo
sobrepasar a la capacitada defensa local. Y si alguna vez lo hizo, sus intentos
se estrellaron contra la seguridad del arquero que, con su colega de enfrente,
y pese a éste a los 5 goles, supo
hacerse acreedor a los aplausos que le tributó el público.
La mancha que está afectando a nuestro fútbol, la reciedumbre con conatos de
mala intención, volvió ayer a hacerse presente y aportó como consecuencia
directa la expulsión de Ortellao a los 36´.
(EL DIARIO. LUNES 22 DE NOVIEMBRE DE 1954)
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