COMIENZA LA PUJA POR SACAR EL CANDIDATO OFICIALISTA
Cada vez más lejos la posibilidad de tocar la constitución provincial para permitir que Urribarri pueda ‘re’ postularse como candidato a gobernador, se ha lanzado el debate interno dentro del kirchnerismo entrerriano para encontrar el reemplazante que aglutine con mejores posibilidades.
No es una tarea sencilla, máxime cuando se está en el poder, sin embargo es algo que se deberá resolver más temprano que tarde. La situación social es tensa y la figura que represente al oficialismo deberá ofrecer cierta garantía hacia la amplia franja de ‘independientes’ que ronda el 30% del electorado.
Para la etapa que viene ya no alcanza con hablar de gestión y otras tareas que ya son una chapa gastada para el gobierno, porque han sido elegidos para eso. Nada nuevo ofrecen cuando refriegan los mismos estandartes.
También en la mencionada franja hay un estado de efervescencia peligrosa, lo que el actual gobernador ha soslayado de cuajo cuando dijo días pasados que son una mínima expresión los adherentes al ‘cacerolazo’. Grueso error que puede llegar a darle por la boca a corto plazo y hacerle perder el crédito que hace poco le otorgó el electorado.
En cuánto a sucesores, ya se han identificado públicamente quienes dicen que no es tiempo aún, pero – curiosamente –resultan ser los mismos que vienen trenzando sigilosamente para quedar prendidos lo más alto posible.
Bordet, Bahl, Cáceres, Solanas son algunos de los apellidos que ya están lanzado al ruedo político. Cada uno por su lado viene armando sus estructuras y estos cuatro pre candidatos serán casi seguro los que integren la grilla más alta de candidaturas para el 2015, a los que hay que agregar al gobernador si no es convocado desde Buenos Aires, esperanza que a mi entender es demasiado remota (en Buenos Aires sobran los aplaudidores de la ola “K”.
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