VIVIENDAS TRUCHAS SE HACEN EN NUESTRA CIUDAD POR PARTE DE UNA MUTUAL

Escándalo por la construcción de viviendas 

que financia la Mutual Modelo 

Una “vivienda digna” con paredes de telgopor con un valor de casi un millón de pesos, aunque los trabajadores sostienen que en realidad su construcción tiene un costo 80% menor, calificando de “vergonzoso” el negocio

FUENTE http://www.davidricardo.com.ar/despachos.asp?cod_Des=21620

Denuncias, quejas y un gran malestar contra empresas constructoras vinculadas socialmente con la Asociación Mutual Modelo comenzaron a realizarse hace pocas semanas, cuando, bajo pretexto y haciendo responsable al gobierno provincial por atrasos en las órdenes de pago manifestado que el mismo no tiene fondos para afrontar las obras publicas contratadas, comenzaron a desvincular laboralmente a su personal en forma masiva.
Según comentaron trabajadores aún en actividad en dichas constructoras, que recurrieron a este Portal y solicitaron no dar a conocer sus nombres por temor de correr la misma suerte que sus compañeros, son más de 30 los empleados, en su mayoría albañiles, los que han quedo sin su fuente de trabajo.
Las quejas de los trabajadores dan cuenta de la “insensibilidad de los empresarios”, quienes, comentaron mientras ellos hacen cuantiosas fiestas y reaperturas de boliches bailables, en una fecha tan emblemática como la navidad y fin de año han quedado sin trabajo y en consecuencia sin un peso para darle sustento a las más de 30 familias que hay detrás de los despedidos. 
Se trataría, sostienen estos trabajadores indignados y compungidos por el drama que están viviendo sus colegas, de empresas bajo la firma Caballi S.A., Sczczech y Sczczech y Cemyc.
Conocidas constructoras de la Provincia, con asiento en la capital entrerriana, conectadas, como es de público conocimiento y así lo sostiene la página web oficial de la entidad, con la Asociación Mutual Modelo, institución presidida por el empresario Adrian Bruffal, con quien aquellas empresas han suscripto convenios para que por su intermedio se financie la adquisición de viviendas.
Si bien las quejas son graves, no resultan ser menos gravosas las denuncias realizadas por los vecinos de San Benito, Colonia Avellaneda y en Paraná en Gobernador Maya donde se están construyendo algunas de las viviendas que financia la mutual presidida por Bruffal.
Aquellos vecinos, utilizando este Portal, se animaron a denunciar públicamente lo defectuoso y precarios materiales con que se construye las viviendas que la mutual ofrece a sus clientes bajo la promesa de acceder a la vivienda propia.
Así, a través de fotografías, algo que este Portal fue a constatar, los mismos comentaron y poniendo de ejemplo a San Benito, que las paredes son realizadas no con ladrillos sino con telgopor, algo que la mutual omite publicar en su página web oficial a la hora de dar a conocer el modelo y las características de los inmuebles.
Es más, varias de las viviendas que aún no se han estrenado, ya se encuentran en su gran parte rajadas, comentándose, que las empresas constructoras, responsables de las obras, a modo de tapar dichas rajaduras, según el lenguaje de los vecinos, las raspan, las canaletean y posteriormente le ponen sella grietas .
Indudablemente que los que pagan estas casas estarían desconociendo el valor real de las mismas, algo que los vecinos calificaron de “vergonzoso”, ya que estamos hablando de cifras cercanas a un millón de pesos que la mutual financia para adquirirlas pero a un costo real de construcción de un 80% menos, por viviendas de un tamaño que oscila entre los 50 y 60 metros cuadrados, ubicadas en las afueras de la ciudad, a una distancia de casi dos kilómetros de la ruta 18 y que no cuentan con los servicios básicos ya que las calles son inaccesibles de transitar. 
Inmuebles que son construidos con fondos del Estado provincial y que son licitadas y adjudicadas por el Instituto Autárquico de Planificación y Vivienda (IAPV), pero que sin embargo su adquirente queda obligado frente a la mutual para el pago de cuotas.
Lo grave y vergonzoso, comentan indignados los vecinos, es que en su mayoría los adquirentes son familias de clase media baja, esto es, con un sueldo que ronda entre los 7000 y 10000 pesos y que ante la necesidad, que es publica, de una vivienda digna y a lo mejor debido al desconocimiento compran de buena fe confiados en que finalmente cumplirán su sueño de tener una casa propia.
Este tipo de construcciones ya generaron una fuerte polémica en varios lugares de la Argentina, el caso más paradigmático fue en Chaco, una de las provincias con mayores niveles de pobreza del país.
En dicha provincia el presidente de la Cámara Argentina de la Construcción, delegación Chaco, Ricardo Siri, denunció, no hace mucho, que a la fundación encabezada por Hebe de Bonafini, la cual se dedicaba a la construcción de viviendas sociales de telgopor y cemento, el Estado les pagaba la vivienda a $210.000 cuando las viviendas ejecutadas por la institución que aquel preside, de idénticas características, estaban cotizadas en $81.000.
Generalmente la operatoria para la financiación, según algunos clientes de la mutual modelo, se haría a través de códigos de descuentos, los cuales figuran en la página oficial de la institución y que se extiende a empleados estatales a un interés usurario, otorgándose el préstamo a riesgo cero debido a que el descuento, con la previa connivencia con el empleador que en su mayoría de las veces es el Estado, es automático.
Indudablemente, comentan los trabajadores y vecinos indignados, se trata de empresas que aprovechan y utilizan sus conexiones con el Estado para, bajo la promesa de acceder a una vivienda digna con un costo por la misma de 8 veces menos de lo que cobran para ser adjudicados con el inmueble, perjudican enormemente a los futuros adquirentes en su mayoría estos empleados de clase media baja, haciéndose, en consecuencia, de millonarias ganancias.