Una mañana, se incendió un edificio de cinco pisos en la ciudad de Buenos Aires.
Una familia de seis chilenos, vivía en el primero. Todos perecieron.
Una familia de ocho bolivianos, vivía en el segundo. Todos muertos.
Una familia de catorce paraguayos vivía en el tercero. También han muerto todos.
Dos familias argentinas, en total 15 personas, recién reubicadas desde la villa 31, vivían en el cuarto piso, y también encontraron horrible muerte.
Una pareja de ancianos italianos vivía en el quinto, pero ambos sobrevivieron.
La comunidad chilena, exigió saber por qué los italianos sobrevivieron cuando todos los demás perecieron.
La ONG A.P.I.I.B. (Asociación Pro Igualdad del Inmigrante Boliviano) ha insistido en que se realice una exhaustiva investigación por considerar que se discriminó al efectuar los rescates, privilegiando injustamente a viejos e italianos.
La "Agencia Ai-Porá para Desocupados Paraguayos en el Exterior" también insistió en que se llevase a cabo una investigación general sobre el cuanto menos "sospechoso deceso" de sus conciudadanos y amenaza iniciar acciones judiciales en contra del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, del Ministerio de Relaciones Exteriores y del Departamento de Bomberos.
El Partido Obrero comenzó inmediatamente una pintada y con la destrucción del Palacio Municipal de Bs. As., iniciaron un escrache a Macri, la quema de cubiertas, y amenazaron con un piquete permanente en Av. de Mayo si no se explicaba por que se salvó a los italianos en lugar de los argentinos.
El jefe de bomberos fue explícito y aclaró:
- Los viejitos italianos sobrevivieron porque eran los únicos que se habían ido a trabajar.
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