Tribuna
de Opinión
EL
ESTALLIDO SOCIAL ESTÁ
A LA VUELTA DE LA ESQUINA
La
jornada de este lunes 9/12 que pasó nos trasladó rápidamente a tiempos que
creíamos superados por la “década ganada”, por este tiempo en que el “relato”
nos pintó de rosa hasta cuando es el luto sinónimo de una paz social atada con
alambres.
Diez
años pasaron desde que llegó el salvador, aquel que se apropió del nombre de
cuánta obra pública se hizo en el país; aquella contención “temporaria” que
arrancó con la masiva asistencia a través de planes sociales que se dieron a
diestra y siniestra, sin lograrse la inserción en el mercado laboral al cabo de
una década, nos abofetea a todos porque terminamos comprobando que estamos
igual, o tal vez… ¡peor!
En
nuestra provincia se da la pauta del problema que tenemos ante esa realidad;
hasta el 27 de octubre “el sueño entrerriano” navegaba aguas abajo sin
dificultades con la ilusión de capturar un asiento que quedaría vacante, aunque
con sus patas enclenques y el dinero público insuflado para sostener una
campaña mentirosa sirvió para acallar todas las miserias.
Pero
duró poco el romance sostenido por una campaña “vende humo” para que todos
despertemos ante la realidad de estos días.
Por
un lado, un pequeño núcleo de policías acuartelados en Concordia tuvo efectos ‘dominó’
y puso en estado de alerta a la masa policial entrerriana que quería mejoras
salariales, con justa razón, permitiendo que la calle fuera tierra de nadie por
unas decenas de horas.
Y
fue entonces cuando el gobernador quedó desnudo de cuerpo entero, confirmando
lo que nosotros desde SAN BENITO AHORA decíamos respecto a sus aspiraciones
presidenciales, cuando afirmábamos que no tenía ‘condiciones’ para semejante
pretensión. Primero Urribarri, cuando el
foco del conflicto estaba en su peor etapa de ebullición, él capturaba cámaras
en el autódromo de Buenos Aires; luego, a primera hora del lunes 9/12 habló de
sedición, de castigo a los responsables, de que con presiones y acuartelados no
se negocia y otras tantas palabras al azahar. Finalmente, en menos de doce
horas, tuvo que ir a Concordia y negociar con los subalternos amotinados,
condonar todo tipo de sanciones, aflojar un aumento que será la medida para que todos los gremios estatales desde hoy martes puedan pedir similar ajuste en
función de una inflación que superó el 30% en este 2013…
...¿en qué quedamos?
Por
otra parte, así llegó el caos generalizado.
El
descontrol no esperó y se posesionó de la calle por parte de hordas de delincuentes
con ‘hambre’ de electrónica y tecnología costosa. Como perros hambrientos
merodeaban los negocios importantes para entrar de cualquier manera,
aprovechando las circunstancias. Horrenda metodología que nos lleva a un
territorio sumamente peligroso si nos atenemos a la historia reciente. Ayer lo vivimos
en nuestra ciudad con el intento de saqueo a un negocio chino ubicado sobre Ruta
18 por parte de aprovechados sin escrúpulos.
Para
nada se justifica que se produzcan estos hechos vandálicos porque no tienen
nada que ver con el hambre y la necesidad extrema, pero es un fuerte llamado de
atención para los que tienen responsabilidades en los distintos estamentos del
estado ya que quedó demostrado que el caos social está a la vuelta de la
esquina, que no hace falta más que alguien encienda la mecha para que
aparezcan los que especulan con estas circunstancias y provocan reacciones
naturales pero en el marco del “sálvese quien pueda” que terminan con la paz
social.
La
‘luz amarilla’ permanece encendida.
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