Tribuna
de Opinión
Por Aníbal González Comas
CUANDO EL RELATO NO ALCANZA...
Y HAY POCO PARA HACER CUANDO "LA CUBIJA ES CORTA"
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| ¡PARTIR.... QUÉ TRISTE ALTERNATIVA.... PARTIR... IGUAL ME DA MORIR!!!! ("Espere Capitán". Chico Novarro) |
La situación del oficialismo vasquista ha entrado en un cono de grises intensos luego del sorpresivo testimonio que requirió del intendente de nuestro ciudad Rubén Ángel Vásquez la defensa de Facundo Bressán en el juicio que se le sigue a este último por el crimen de Priscila Hartman.
En realidad este golpe directo al hígado no tuvo consecuencias de knockout pero la falta de ejercicios atléticos de nuestro atareado alcalde hizo que la brújula conductora comenzara a girar alocadamente en un espacio y tiempo que requiere de mucho estabilidad emocional para manejarse sin delatar debilidades.
La actuación de Vásquez BB - tan saturada de dificultades - venía a los tumbos desde tiempos más remotos, desde que al intendente lo encontraron en el Parque Urquiza de Paraná con unos cuantos gramos que superaban el cálculo de un consumo privado proporcional, o cuando lo denunciaron por la tenencia irregular y amenazas con un arma de fuego en una estación de servicios de Crespo, o cuando la fallida realización de la fiesta de primavera "Complejo Garden" del 2013 que iba a ser un negocio privado utilizando bienes públicos (lo encontraron robando energía eléctrica), o cuando se descubrió la construcción de una fastuosa finca en Sauce Montrull cuya millonaria inversión no se condice con lo que pudo haber ganado desde cuando Santiago Gaitán le pagaba 15.000 mangos entre 2007 y 2011 para ser "ñoqui" de la D.P.V. y luego con el sueldo de intendente (primer trabajo legal que tuvo en su corta vida), o cuando revolucionó la recatada colectividad del centro con habituales ratoneadas y fiestitas con una mujer casada cuyo hogar terminó de romper, o cuando decidió vivir en Paraná para que no vaya nadie a molestarlo a la casa, o cuando pernoctaba varios noches de la semana en cercanías de Villa Mabel, o el secuestro producido días pasados de los registros de conducir "truchos" que tienen su sello y firma, y otras tantas etcéteras.
Demás está decir que la decadencia del vasquismo en San Benito no es atribuible tanto a la falta de respuestas a múltiples demandas populares sino que es - precisamente - la serie de conductas que superan todo cálculo de lo que está permitido a los que usufructúan del poder circunstancial con la generosa financiación del dinero público.
Hoy la situación se ha tensado porque las aguas se dividen en el oficialismo local, producto de la sustancial dispersión de adhesiones que han preferido buscar otros horizontes de cara a las P.A.S.O. que se vienen con una velocidad inusual.
Uno de los que fuera referente y empleado cercano a los Vásquez decidió cortarse con vuelo propio y lanzó su candidatura por fuera del FPV, otro que llegó a ser ladero principal con beca asegurada por cuatro años decidió dar el debate de "ideas" (¿?) haciéndole la interna dentro del oficialismo, otra que fuera referente. concejala y presidenta de bloque decidió irse a la vereda del frente en la interna que se viene, por mencionar tres casos testigo sobre otros tantos que "se dieron vuelta".
Sin duda alguna los fantasmas en el bunker oficial se agitan con insistencia en una mezcla de sanción en las urnas y sanción en el banquillo de tribunales.
El problema es que el procesado Rubén Ángel Vásquez, con changa en la legislatura, está comenzando a 'fruncir el tuje' mirando a febrero del año entrante cuando haya perdido el estado de inmunidad parlamentaria y tenga que responder en juicio oral y público por falsificación de documento público para perjudicar a un empleado municipal de San Benito, algo que lo llevará a una posible condena como la que recayó sobre su actual socio Oscar Dionisio Acosta, quien cumple en su domicilio la condena de tres años de prisión y seis de inhabilidad para ejercer cargos públicos por la misma carátula incriminatoria.
Esto significa que Vásquez Pá luchará por todos los medios para colarse en la lista sábana que armará el dedo de Urribarri en la grilla de legisladores provinciales para dilatar un poco más el tiempo de la espada de Damocles que pende sobre su cabeza.
¡Es así de simple. La justicia es lenta... pero llega!
Con el capitán del barco oficial de nuestra ciudad luchando para que el misil de la justicia no lo hunda del todo y con su 'chirolita testaferro' ingresando en el mismo territorio de los pasillos judiciales por varias causas, el relato se desvaloriza entre su propia tropa y cunde el pánico de sólo pensar que la vaca lechera está próxima a parir de nuevo y la leche tendrá otro destino por designios de la naturaleza.
La vanagloria no permite corregir el rumbo y la creencia de que el poder político es hereditario socavan tanto la humildad como la honestidad, causales principales que generan la dispersión de adherentes, que ya no se pueden contener con promesas porque las de otrora nunca se cumplieron, porque la mentira fue una constante que ya no se puede contener, y porque la falta de visión estratégica ante un horizonte tan preocupante no les permite tomar decisiones cautivantes que recuperen credibilidad entre los esquivos seguidores.
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