COMIENZA A SINCERARSE LA POLÍTICA ENTRERRIANA

SE VIENE LA NOCHE... ¡Y EL FRÍO!!!...

y la cubija es corta!!!!

- ¿QUE... QUÉEEEEE???
¿EL PEMO 'GASTAENVINO' ES EL CANDIDATO A GOBERNADOR DE LA CRISTINA???

Tomado de Radio La Voz:

INTENTANDO NO PERDER PODER.

La gran encrucijada:

¿Y si adelantar las elecciones tampoco sirve?

"El entorno más cercano a Urribarri (foto) ha quedado en manos de su hijo Mauro, el ministro Pedro Báez (ninguno de los dos goza de las simpatías del peronismo más ortodoxo) y un reducido grupo de obsecuentes y algún que otro diputado o senador provincial. Báez y Mauro Urribarri son quienes pugnan por un adelantamiento de las elecciones ya que creen que aún pueden aunque sea mantener algo de poder aunque pierdan la gobernación."

Sergio Urribarri cuenta todavía con algunos días para convocar a elecciones anticipadas y votar en marzo como lo establece la Ley N°2.988, vigente desde el año 1934 y que utilizara el entonces gobernador Jorge Busti en 2007 para votar en forma separada de la Nación y beneficiar así a su delfín, el actual gobernador, quien más tarde lo abandonaría para irse con los Kirchner.

Semanas atrás, Urribarri creía que adelantando las elecciones potenciaba sus probabilidades en la interna kirchnerista por la sucesión de Cristina Fernández, descontando con que los rivales de quien él designara como su sucesor no tendrían posibilidades al no poder atar sus candidaturas a la gobernación con una figura nacional, como Sergio Massa, Daniel Scioli o Mauricio Macri.

El gobernador pensaba que un triunfo además le daba la posibilidad de lograr un acuerdo para ir por la vicepresidencia de la Nación, en caso de no prosperar “su sueño” mayor.

Sin embargo una encuesta encomendada para verificar cual es el humor de la población con respecto a un eventual adelantamiento, habría echado por tierra esa alternativa. La encuesta no solo mostró que a la sociedad ni siquiera le interesa el tema, sino, y eso es lo más grave, que las diferencias que los 2 principales candidatos de la oposición, Adrián Fuertes (Frente Renovador) y Alfredo De Ángeli (PRO), le sacan en todos los rubros consultados a los posibles candidatos del oficialismo, es tan grande que sería imposible descontar en los meses que quedan hasta marzo.

Además, cuando Fuertes y De Ángeli son medidos junto a Sergio Massa y Mauricio Macri, las diferencias se acentúan, demostrando que las elecciones en octubre mucho menos garantizan atesorar una pizca de poder.

Este hecho ha puesto en una situación muy incómoda a Urribarri ya que si adelantara las elecciones para tratar de conservar algo de poder, la imagen de una derrota de un gobernador que siempre se mostró como el mejor alumno de Cristina, más allá de lo que Entre Ríos pese en el contexto nacional electoralmente, sería tremendamente desastroso para el resto del kirchnerismo y de quienes aún creen poder seguir disfrutando de sus mieles.

Por eso algunos peronistas no tan kirchneristas, como uno de los tres diputados nacionales del Frente para la Victoria cuyo mandato vence el año que viene, con mucha influencia en Paraná, comienzan a refunfuñar 'off the record' contra las decisiones políticas de Urribarri.

“El Pato (Urribarri) sabía muy bien, porque se lo habíamos dicho, que si dejaba pasar el tiempo sin designar un candidato propio, aunque después fuera a internas con otros, se le iba a podrir todo, pero se dejó encandilar por todos los bo….. y pend…. bobos que lo rodean y así nos ca.. a todos, porque ahora no sabe qué cara.. hacer y nos embretó. Lo único que espero es que por los menos después venga a poner la cara ante todos ustedes compañeros”, dijo, enojadísimo, un diputado nacional, avizorando difícil su futuro político.

El comentario, en su local de calle Gualeguaychú, en esta ciudad, es acertado: todos quienes creyeron en el "gran sueño entrerriano" están embretados en los errores de Urribarri y no les queda más remedio que padecer con él.

El entorno más cercano a Urribarri ha quedado en manos de su hijo Mauro, el ministro Pedro Báez (ninguno de los dos goza de las simpatías del peronismo más ortodoxo) y un reducido grupo de obsecuentes y algún que otro diputado o senador provincial.

Báez y Mauro Urribarri son quienes pugnan por un adelantamiento de las elecciones ya que creen que aún pueden aunque sea mantener algo de poder aunque pierdan la gobernación.

“Esperar hasta octubre sería mortal”, señalan.

Por eso hoy todos los medios de comunicación que maneja Báez salieron al unísono a tratar de imponer un clima de adelantamiento de las elecciones y hasta resaltando que también la UCR se vería beneficiada si eso sucediera. Una intentona muy burda que solo muestra desesperación.

Urribarri ahora sabe que ni adelantando las elecciones podrá contra la oposición que tan rápidamente creció. Algo que ocurrió por su pésima gestión de gobierno, por la incompetencia de sus colaboradores y por las torpezas de sus operadores políticos.

Fuertes y De Ángeli ya no se preocupan por lo que haga el gobernador en relación a la fecha de las elecciones. Sólo se ocupan de sus propias candidaturas para seguir sumando casi sin demasiado esfuerzo, y muchos dicen que en pocos días más esas sumas contarán también con muchos hasta hoy oficialistas persuadidos de que ha llegado la hora de migrar.

Mientras tanto, a Urribarri le queda definir una fecha que, antes o después, solo servirá para marcar el definitivo final del “gran sueño entrerriano” (de unos pocos).