CAPATAZ FARIGNONI, ALIAS 'BIGOTE', AGREDIÓ DE HECHO A UN EMPLEADO POR ALCAHUETE!!!
Se dio un nuevo capítulo del violento capataz municipal de San Benito Bigote Farignoni el viernes 27 de diciembre en la ex Fábrica Municipal de Ladrillos en Boulevard Crespo Oeste donde agredió con una unidad de la comuna a un empleado que se encontraba en el lugar.Para terminar de descargar su bronca el violento capataz no tuvo mejor idea que tomar al empleado camionero del cuello y gritarle:
- ¡Te voy a matar... alcaguete hijo de puta!
Russián se encontraba en compañía de otros compañeros, entre ellos, un tractorista y bicicletero de apellido Ferrari, Santillán y el propio hijo de Farignoni.
Al parecer, según trascendidos de los propios empleados, el entuerto nació cuando no se realizó como era uso y costumbre una 'repartija' de dinero extra producto de la venta de camionadas de tierras a particulares, costumbre que data de los tiempos de 'Tachuela' Acosta.
Los 'isocas' oficiales tienen bien aceitado este 'curro', justificando la ganga de una interminable perinola con suerte....¡todos ganan! Pero en las cercanías de fin de año las necesidades de llevar los regalos al hogar hizo que el Secretario Municipal Lisandro Reya y el concejal FpV Alejandro Ledesma se tentaran y pasaron 'al cuarto' al que realizó la changa de llevar tierra a un necesitado vecino.
'Nicky Russián' había llevado varios viajes de tierra al terreno de un remisero, alias "Carlos", domiciliado en cercanias de Marizza y Friuli y vinculado con la militancia oficialista; cuando terminó la tarea y ante la premura de que terminen las ofertas de sidra y pan dulce en el Súper local, reclamó a Carlos el pago de trabajo realizado con tanto esmero, pero la sorpresa fue mayúscula cuando el beneficiario de la atención oficial le respondió que el efectivo ya había sido recibido por Farignoni y que éste ya había seguido con la cadena de mandos con los mencionados Ledesma y Reya.
Al comprobar Russián que le "habían hecho la bicicleta" comenzó a "zapatear por lo suyo, pero sobre el tema nadie sabía nada". Atento a la premura por encontrarse con algunos mangos extras para la fiesta de fin de año no tuvo mejor idea que hablar con el propio Intendente Vásquez BB, quien tampoco había autorizado el giro de la perinola benefactora como era de costumbre.
Así las cosas el intendente pudo comprobar que lo habían 'pasado para el cuarto' sus laderos principales - esa herejía del dinero en efectivo que ya aterrizó en el bolsillo - y comenzó la rápida investigación sumaria y todo quedó al descubierto llevando la peor parte el capataz Farignoni, honrando aquello de que el hilo se corta por lo más delgado.
De allí al ataque violento al empleado camionero hubo poca distancia, por Farignoni no demoró en 'montar el picaso' y buscarlo por todas partes para ponerlo en situación debido a que lo había puesto en evidencia ante el jefe comunal que pudo ver con sus propios ojos que...
¡La fidelidad tiene como límite el mango en efectivo!
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