TREMENDA DETERMINACIÓN
DE UNA JOVEN DE NUESTRA CIUDAD
Hicimos silencio estas horas porque - como lo estábamos todos en San Benito - nos invadió el desconcierto y la pena por algo que era insospechado.
Dramático final!
Triste para toda una familia y para la comunidad de amigos, compañeros, conocidos y población en general.
Nos resistimos a aceptar esta realidad cruel, pero es así.
Valga el deseo de que sus familiares asuman lo ocurrido con valor y con la justa resignación, mirando hacia adelante, ya que la vida sigo girando en un sólo sentido inexorablemente.
Sabina Narela Natella ya no estará con su brisa juvenil.
¿Es acaso el momento para hacer comentarios puntuales, elucubrar hipótesis, entrometerse en cuestiones privadas?
¡Definitivamente: no!
Es lo que desde SAN BENITO AHORA pesamos en estos difíciles momentos por los que atraviesa una familia conocida, que no merece otra cosa que la condolencia sincera, el respeto, el silencio y la mano extendida.
Nada más.
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