Tribuna
de Opinión
Por ANIBAL GONZÁLEZ COMAS
No caben dudas que la opinión generalizada de la
población de nuestra ciudad entiende que se ha recuperado el sentido de lo que
significa un gobierno local, en el que ha tenido un rol importante la actuación
del H. Concejo Deliberante, donde se han producido trabajos interesantes que se
transformaron en leyes para la ciudad y que la tarea del Ejecutivo ha tenido
éxitos parciales en algunos aspectos y algunos yerros que se particularizan con
claridad.
El karma está en la vía pública.
Allí está el generalizado reclamo, puntualmente
desde los barrios periféricos, donde el crecimiento poblacional, potenciado por
loteos ‘liberados’ hace unos años atrás, hace que la obra pública básica esté en
deuda.
El condicionante – que justifica parcialmente
al D.E. M. - ha sido la falta de equipos viales aptos, dejados
en condiciones de precariedad por la gestión vazquista; por otra parte, ya no
se puede recurrir a la D.P.V. pidiendo auxilio ya que la ‘colaboración’ del
diputado local A. Vázquez consiste en una interferencia continua ante las
autoridades provinciales para que no ayuden a esta gestión encabezada por el
intendente Exequiel Donda, maniobras que realiza con persistencia, pensando en
alguna remota posibilidad que le de chances electorales para el 2019…. ¡falta
demasiado en términos políticos… y eso se irá viendo en el curso de los dos
largos años que faltan para otra contienda electoral!
No es una excusa. Es una verdad que debe constar en
el análisis de lo que nos ocurre.
Tuvo un rol preponderante el tornado de febrero/2016
que cambió todos los planes previos y a las grandes lluvias se sumaron algunos flagelos que asolaron algunos barrios.
Pero nada es causal suficiente para no llegar con respuestas
a nuestra población en materia vial. Allí está la deuda pendiente que habrá que
salir a solucionar desde enero del año entrante. Sabemos que el intendente
Donda está pensando en la adquisición de equipos viales nuevos – una motoniveladora,
un “pata de cabra” autopropulsado, otro regador, otro atmosférico, etc. Para
ello deberá recurrir al H.C.D a los efectos de la autorización pertinente.
Hubo algunas cosas positivas en lo que respecta a la
calle, como la reforma del ingreso por Friuli y su intersección con San Martín,
por poner un ejemplo. Hubo reposición de suelo calcáreo en muchas arterias
barriales, pero no alcanzó. Falta… falta demasiado en esta materia, se puede concluir que el
“parcial” de la misma no ha sido aprobado y habrá que esmerarse en ese sentido.
En otros aspectos hay una tenue recuperación de las
organizaciones barriales, y mayor contacto con las fuerzas vivas y con las
instituciones que favorecen una mayor participación ciudadana. El municipio
participó intensamente en la celebración del centenario de nuestro club, colaboró y estuvo activo en encuentros sociales y deportivos.
El intendente ha sido mesurado, no mediático, un
profesional que acusó su falta de conocimiento de la ‘cosa pública’, aunque se
rescató bastante y se puede afirmar que a esta altura está sujeto a una línea
de acción prefijada, con muchos planes, con varios proyectos en gestión, con
uno que ya coronó con éxito: el ‘Plan Habitat’ que posibilitará sensibles mejoras
en el Barrio San Martín y otras quince manzanas en el Loteo Portal del Sol,
hasta la calle Tibiletti. Con ese sólo proyecto se hará más obra pública en la
calle que en los doce años del vasquismo.
Pero avanzan las gestiones para otras tantas mejoras
barriales que darán un gran impulso a nuestra ciudad, que se proyecta a mediano plazo con grandes posibilidades si se concreta el paso de la principal vía interoceánica a través de un puente Paraná - Santa Fe, en cuyo diseño San Benito tendrá un rol interesante desde que pasará la circunvalación que conectará con las rutas hacia el sur provincial.
Sabemos que es decisión tomada la cancelación definitiva
del Convenio con la U.O.C.R.A. por la explotación de las piletas de natación Parque
Vieytes, lo que postergará para otro verano el uso integral de estas
instalaciones, pero ya está decidido encarar su explotación desde la propia
estructura municipal.
Por otra parte, el intendente Donda ha desactivado
bastante la bomba de tiempo que le dejó el vazquizmo en el orden laboral,
respecto al sector obrero y tiene en carpeta la jerarquización en sus tareas a
una parte importante de la plantilla actual de empleados y obreros, lo que
redundará en una mejor relación ‘patronal’ (en términos laborales)
En definitiva, sería extenso enumerar otras tantas
realidades, a sabiendas que chocará con opiniones de tantos vecinos que están
insatisfechos por obras viales postergadas en los barrios, pero desde SAN BENITO
AHORA le damos un voto de confianza, sabiendo que se viene esforzando la administración
municipal encabezada por el intendente Exequiel Donda para lograr conquistas
desde la faz propia y con la ayuda – en particular – del estado nacional.