LA VERDADERA HISTORIA DEL JUICIO A OSCAR ACOSTA

SU SECRETARIA LO DENUNCIÓ POR FALSIFICACIÓN DE UN ESCRITO.

FUIMOS TESTIGOS DE LO OCURRIDO…

Cuando en el radicalismo fogoneaban desde la Casa de Gobierno el conflicto que tuvo el ex intendente Oscar Acosta con los empleados por estar varios meses atrasados en el pago de los sueldos hubo algunos comedidos que arrimaban leña para que el fuego no se apagara.

Entre ellos, aunque parezca mentira, estaba el por entonces ignoto Ángel Vásquez quien, interesado por hacerse ver, inventó que había realizado un viaje a la ciudad de San Pedro, Bs. Aires junto con su compinche José Luis Cogno donde “habían comprobado que Mariela Aguirre vivía en un fastuoso chalet en las afueras de la ciudad del que traían fotografías”, tratando de hacer entender que allí estaba lo que se habría robado de nuestra ciudad.

Muchos creyeron la versión. Nosotros tuvimos dudas y nos fuimos a aquella ciudad y, averiguando, llegamos hasta donde estaba recluida por entonces la familia Gallardo Aguirre. Fotografiamos el lugar y nos detuvieron porque M. Aguirre nos denunció a la policía que le estábamos apuntando con una carabina; en realidad estábamos tomando fotografías para mostrar en San Benito la verdad de lo que pasaba. Superado el trance con apoyo de un abogado amigo en esa ciudad que nos mandó un concejal socialista, los denunciantes comprendieron lo que realmente pasaba y nos llevaron hasta su casa.

El famoso chalet era simplemente un pequeño y modesto departamento de dos plantas, nada suntuoso.

Nosotros le reclamamos entonces a Mariela Aguirre que renunciara a su cargo de Vocal de la Junta de Fomento porque entendíamos que no podía ejercer esa responsabilidad a tanta distancia. Ella prometió analizar el tema y coincidió con nosotros en ese punto.

Un buen día, tiempo más tarde, se apersonó el matrimonio Gallardo Aguirre en nuestra casa de calle Ramírez para dejarnos la copia de una nota que habían presentado ese día por la que M. Aguirre presentaba formalmente la renuncia como Vocal de la Junta; el objetivo era que nosotros comprobáramos que realmente se iba a tratar y aprobar esa renuncia en la próxima reunión del cuerpo colegiado.

Así fue. Se leyó y aprobó el escrito presentado.

¡EN LA UP 1 DE PARANÁ...YA SE FROTAN LAS MANOS..!
LES ENVIARÍAN CARNE FRESCA...

 Con el tiempo, dicha nota fue enmendada por Oscar Ocosta y su secretario Aníbal Ríos – falsificada – agregándosele a la renuncia como Vocal la renuncia en calidad de empleada de la municipalidad, cargo que tenía reservado desde que había ido a probar suerte a la provincia de Buenos Aires.

El día que regresó e intentó retomar el puesto de empleada administrativa se encontró con la sorpresa y le fue imposible acceder al trabajo…hasta ahora.

Llegó la denuncia y…la falsificación era demasiado burda para pasar desapercibida, por lo cual el juez de instrucción actuante no dudó en enviar a juicio oral y público para el próximo 27 de setiembre a los presuntos delincuentes Carlos Aníbal Ríos y Oscar Dionisio Acosta.